El nuevo año llegó con un devastador atentado terrorista en Nueva Orleans.
Según un informe del FBI, a las 3:15 am hora local, un hombre llamado Shamsud-Din Jabbar, de 42 años, condujo deliberadamente una camioneta hacia una multitud en Bourbon Street. El FBI está tratando oficialmente el ataque “como un acto de terrorismo”, después de que Jabbar atravesó a la multitud que celebraba durante más de tres cuadras antes de salir del camión y abrir fuego contra los agentes de policía.
Al menos dos agentes de policía resultaron heridos de bala antes de responder al fuego y matar a Jabbar. El atacante ahora está acusado de matar al menos a 15 personas e herir a decenas más, y se espera que la cifra de muertos aumente.
El presidente Joe Biden dijo el miércoles por la noche que el FBI descubrió videos publicados en las redes sociales donde Jabbar decía que se había inspirado en ISIS y que quería matar gente. El FBI también confirmó que Jabbar tenía una bandera de ISIS adherida a su vehículo. Si bien esta bandera refleja sus claras simpatías por la organización terrorista y su ideología islámica, el nombre completo de Jabbar indica su herencia árabe-islámica. Aunque nació en Texas, su nombre es claramente árabe con un significado claramente islámico, ya que “Shamsud-Din” significa la estrella brillante de la religión, mientras que “Jabbar” es un nombre de Alá, que significa “el poderoso”.
Aunque es de esperar que sepamos más sobre los motivos de Jabbar en los próximos días, especialmente porque el FBI no cree que él sea el único responsable, probablemente podamos concluir que ISIS no está muerto y continúa reclutando simpatizantes y cultivando soldados.
¿Cómo debemos entender a este grupo terrorista islámico?
Necesitamos reconocer que ISIS es una organización terrorista basada en agendas salafistas y yihadistas. Ambas palabras son necesarias para entender por qué sus miembros odian todo lo que no sea musulmán.
En primer lugar, ISIS es salafista, lo que significa que anhela imitar los primeros días del Islam tal como están registrados en su historia, buscando aplicar la religión al pie de la letra. Para un musulmán salafista, la modernidad es mala y cualquier innovación es una herejía, ya que los mejores días del Islam fueron los de Mahoma y sus compañeros, quienes son aclamados como brillantes modelos humanos a imitar.
La lógica de un musulmán salafista es simple: si Mahoma y sus primeros seguidores lanzaron ataques contra los no musulmanes, ocuparon tierras y masacraron a sus enemigos, entonces estas acciones no son despreciadas sino más bien sagradas y deben ser emuladas por los creyentes. Para los musulmanes salafistas, el mundo debe volverse musulmán por todos los medios, ya sean pacíficos o no.
Esta es la razón por la que en 2014, ISIS se declaró califato, utilizando un término claramente musulmán, y se apoderó de vastas extensiones de territorio en Irak y Siria, declarando que buscaría invadir Roma, que, según los textos islámicos, es el corazón del cristianismo. . Un grupo salafista busca vincular todo lo que hace con términos islámicos sagrados y significados religiosos sagrados.
ISIS es también un grupo yihadista, un ejecutor de la yihad. Según los escritos históricos y las escrituras del Islam, la yihad es una guerra armada contra los no musulmanes por la causa de Alá. Mientras que muchos musulmanes en Occidente intentan describir la yihad simplemente como una actividad para ser piadoso o un intento de mantener una actitud de autocontrol contra los deseos mundanos lujuriosos, no hay duda de que las fuentes musulmanas originales utilizan el término yihad como sinónimo de guerra santa por la causa de Alá de subyugar al mundo bajo el Islam.
Para los musulmanes yihadistas, luchar por Alá no es sólo un deber religioso sino que es precisamente su acto religioso más notable. Cuando Mahoma, según los textos musulmanes, atacó a judíos y cristianos, no estaba merodeando a la gente y apoderándose de sus posesiones, sino más bien aplicando el deber sagrado de la yihad para complacer a Alá.
Pero ¿por qué Jabbar, como estadounidense, se identificó con esta ideología?
No conocemos el corazón de nadie, pero muchos musulmanes encuentran atractivo a ISIS y su ideología, especialmente porque insiste en aplicar el Islam tal como fue concebido originalmente. Si bien muchos musulmanes en Occidente quieren vivir y dejar vivir a otros, la existencia de predicadores salafistas yihadistas en nuestros vecindarios es una gran alarma. Con la afirmación de la libertad religiosa en nuestras sociedades, ISIS tiene seguidores entre nosotros esperando la oportunidad oportuna para cumplir lo que consideran prescripciones de Alá.
La libertad de expresión y la libertad de religión son sagradas en las sociedades occidentales. Esto es loable, pero a menos que los predicadores del odio y los simpatizantes de ISIS –que claramente apoyan la destrucción de nuestras sociedades– sean identificados y controlados, y en ocasiones deportados, siempre viviremos con una bomba lista para detonar.
