Un juez federal de Florida ordenó el lunes que Ryan Routh permaneciera en prisión preventiva después de que los fiscales federales publicaran más detalles sobre su fallido plan para asesinar al expresidente Donald Trump. Los investigadores argumentaron que Routh debía permanecer en prisión después de encontrar evidencia que sugería que el aspirante a asesino podría intentar huir del país. El vehículo de Routh contenía seis teléfonos celulares cuando las autoridades lo registraron, y uno mostró una búsqueda en Google para viajar desde el condado de Palm Beach a México, según los registros judiciales. Las autoridades también encontraron una licencia de conducir de Hawái y un pasaporte a nombre de Routh dentro del vehículo.
Los fiscales acusaron a Routh de posesión de un arma de fuego como delincuente convicto y de posesión de un arma de fuego con un número de serie borrado. Routh esperó cerca del sexto hoyo en la cancha de golf de Trump en West Palm Beach con un rifle semiautomático cargado con un total de 11 balas, incluida una bala en la recámara, según un expediente judicial del lunes.
¿Por qué no lo acusan por el intento de asesinato? El gobierno planea presentar cargos por asesinato contra Routh, dijeron los fiscales federales en la audiencia de detención del lunes. Los fiscales presentaron una nota escrita a mano por Routh meses antes de su arresto en la que se refería a su plan como un intento de asesinato. La nota estaba en una caja que Routh dejó en la casa de un amigo varios meses antes de su arresto. Routh aparentemente predijo que su complot sería frustrado, escribiendo: “Querido mundo, este fue un intento de asesinato contra Donald Trump, pero te fallé”. Luego ofreció $150,000 a “quien pueda completar el trabajo”.
Según los fiscales, la caja también contenía municiones, un tubo de metal, materiales de construcción diversos, herramientas, cuatro teléfonos y varias cartas más. Los investigadores supuestamente encontraron más pruebas de premeditación en el cuaderno de Routh, que incluía una lista escrita a mano de fechas y lugares de agosto a octubre en los que Trump aparecería o ya había aparecido.
