La Corte Suprema de Texas se pronunciará sobre un caso de libertad religiosa que involucra a nativos americanos

El tribunal más alto del estado de la Estrella Solitaria decidirá si San Antonio violaría el derecho de los nativos americanos al libre ejercicio de la religión si cierra temporalmente parte de un parque local que un grupo religioso local considera sagrado. La Iglesia Nativa Americana Lipan-Apache afirma participar en prácticas religiosas que fusionan las creencias cristianas y tradicionales Lipan-Apache, según documentos judiciales. Como resultado, el grupo dice que sus ceremonias religiosas se verán obstaculizadas si San Antonio cierra el parque. La ciudad también planea eliminar más del 80% de los árboles de la sección sagrada del parque del sur de Texas conocida como Lambert Beach, lo que, según los líderes del grupo religioso, también inhibiría su culto. La remoción de árboles es necesaria para evitar la anidación de aves y la falla de la infraestructura, los cuales causan un peligro para la salud, afirmaron los funcionarios de la ciudad. El demandante Gary Pérez dijo Servicio de noticias religiosas que eliminar los árboles y los pájaros destruiría la ecología espiritual del terreno sagrado. Lo comparó con tratar de entender el Nuevo Testamento de la Biblia sin poder hacer referencia al Antiguo Testamento.

¿Qué hace que este sea un caso histórico? El argumento de los demandantes depende de una enmienda estatal promulgada después de la pandemia de COVID-19 que prohíbe a los funcionarios estatales o locales emitir órdenes que detengan o limiten los servicios religiosos. Este sería el primer fallo que interpreta los límites de la enmienda no probada, según el informe de fondo del gobierno.

¿Cómo argumentará la ciudad para cerrar el parque si los servicios religiosos están protegidos constitucionalmente? El gobierno pidió al tribunal que interpretara cómo cambiaría la aplicación de la enmienda estatal dependiendo del tipo de limitación que impusiera el gobierno. Los abogados de la ciudad también pidieron al tribunal que interpretara si los intereses y las intenciones del gobierno detrás de la limitación afectarían la forma en que se aplica la enmienda.

El panel del tribunal integrado por ocho magistrados y un presidente del Tribunal Supremo escuchó los argumentos orales de ambas partes la semana pasada, pero no ha indicado cuándo se podrá emitir un fallo.