El miércoles, la Cámara de Representantes votó 219-194 para aprobar una resolución que condena a 15 funcionarios del gobierno de Biden que jugaron un papel en la retirada de las fuerzas armadas estadounidenses de Afganistán en 2021.
La lista incluye al presidente Joe Biden, a la vicepresidenta Kamala Harris, al secretario de Estado Antony Blinken y más.
Diez demócratas votaron a favor del paquete.
Todos los nombres que aparecen en la resolución del martes se derivan de un informe de 300 páginas publicado por el Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes a principios de este mes. El informe es la culminación de dos años de investigación sobre el mortal atentado con bomba en Abbey Gate el 26 de agosto de 2021. El ataque, llevado a cabo por un insurgente del ISIS-K con un explosivo suicida, mató a 13 militares estadounidenses y aproximadamente 170 civiles afganos, según el Departamento de Defensa.
Los miembros del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes creen que la falta de coordinación, comunicación y previsión contribuyó innecesariamente a la probabilidad de un ataque de ese tipo. Su informe amplía la descripción de esos fallos percibidos en tres grandes categorías: fallos estratégicos, fallos tácticos parte I y fallos tácticos parte II.
Los demócratas afirmaron que el informe y la votación del miércoles son poco más que un truco político que politiza los trágicos acontecimientos del 26 de agosto. Cuando se le preguntó sobre muchos de los detalles del informe, el representante Gregory Meeks, demócrata por Nueva York, el miembro de mayor rango del Comité de Asuntos Exteriores, dijo que los republicanos están utilizando el beneficio de la retrospectiva para atacar de manera inapropiada a los funcionarios del gobierno que tomaron la mejor decisión que pudieron en esas circunstancias.
¿Qué logra la resolución? Por sí solo, el proyecto de ley no tiene poder vinculante. Los republicanos esperan atraer más atención hacia las debilidades de la política exterior del gobierno de Biden a menos de dos meses de las elecciones de noviembre.
Aunque el informe en sí mismo identifica a la vicepresidenta Kamala Harris individualmente por su nombre solo tres veces en el cuerpo del informe, los republicanos se han centrado especialmente en la afirmación de Harris de que ella era la “última persona en la sala” mientras el presidente Joe Biden deliberaba sobre las evacuaciones de las fuerzas armadas estadounidenses de Afganistán. El informe también hace cientos de referencias a “la administración Biden-Harris”.
Cuando se le preguntó qué otros tipos de rendición de cuentas podrían intentar implementar los republicanos, el representante Mark Green, RT.N., dijo: MUNDO Él espera que una posible administración republicana continúe desviando las prioridades políticas del país de las de la administración Biden en lo que respecta a Afganistán.
“Una cosa sé con certeza: gran parte del dinero que sigue llegando a los talibanes… se acabará”, afirmó Green.
