El juez de distrito de Estados Unidos, John L. Sinatra Jr., emitió el martes una orden preliminar que prohíbe a la fiscal general de Nueva York, Letitia James, silenciar a los centros pro vida que promueven el embarazo y que no comparten información sobre los tratamientos de reversión de la píldora abortiva, o APR. James intimidó a los grupos pro vida que promocionaban el APR y los amenazó con demandas, según una presentación conjunta de Summit Life Outreach Center y The Evergreen Association. Las amenazas de James hicieron que los grupos evitaran promocionar el APR en línea, violando sus derechos de libertad de expresión de la Primera Enmienda, según Thomas More Society, una firma de abogados sin fines de lucro que representa a los grupos. James sostiene que los grupos están haciendo declaraciones falsas y engañosas, y que el aborto no se puede revertir.
¿Qué sucede a continuación en el proceso judicial? La medida cautelar sólo protege temporalmente a los grupos de ser procesados mientras el caso se resuelve en los tribunales. Si la demanda es desestimada o el tribunal falla en su contra, los grupos pierden la protección legal para publicitar APR.
En abril, una docena de grupos pro vida se unieron a una demanda similar contra James en un tribunal estatal. En esa demanda también se acusó a su oficina de amenazar e intimidar a los centros de atención de embarazo que ofrecen APR. Su oficina envió a al menos una docena de centros de atención de embarazo una notificación de su intención de demandar, acusando a los centros de reiteradas declaraciones engañosas y omisiones con respecto a APR. Heartbeat International encabezó la coalición de centros de atención de embarazo representada por la Sociedad Thomas More.
¿Cómo funciona la TAE? Una mujer que se somete a un aborto químico toma dos medicamentos. En primer lugar, una dosis de mifepristona hace que el revestimiento uterino se vuelva más fino, lo que hace que el útero sea inhabitable para el embrión. Un segundo medicamento, el misoprostol, se tomaría uno o dos días después para inducir el parto. Sin embargo, entre los dos medicamentos, una mujer puede revertir el proceso y tomar dosis de progesterona para estabilizar el útero, según la Asociación Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos Pro-Vida.