Dado que la inmigración es un tema prioritario para los votantes republicanos en estas elecciones, el Subcomité de Seguridad Fronteriza y Cumplimiento de la Ley de la Cámara de Representantes convocó una audiencia el jueves por la mañana para investigar si los terroristas se están aprovechando de la crisis de seguridad en la frontera sur.
Los testigos dijeron que la amenaza, aunque no se ha materializado de manera significativa en el pasado, es una preocupación para las fuerzas del orden. La audiencia puso de relieve las profundas divisiones partidarias sobre el tema de la seguridad fronteriza, pero algunos legisladores que salieron de la audiencia dijeron que esperaban que se tradujera en un camino viable para seguir adelante.
“La audiencia fue informativa”, dijo el representante Lou Correa, demócrata por California y miembro de mayor rango del subcomité, cuando se le preguntó qué había aprendido. “Ambas partes tenían sus puntos de vista. Creo que lo que hizo esa audiencia fue que algunos de nosotros pensáramos en ideas sobre cómo podemos trabajar juntos”.
Correa dijo que los republicanos y los demócratas estaban negociando una nueva legislación que se propondrá la próxima semana para abordar el tema. No identificó los proyectos de ley específicos a los que se refería.
Los republicanos en el Capitolio comenzaron a dar la voz de alarma formalmente sobre los terroristas que cruzaban la frontera sur cuando la Oficina de Inteligencia y Análisis del Departamento de Seguridad Nacional publicó su Evaluación de Amenazas Nacionales prospectiva para 2024.
El informe concluyó que los funcionarios de la frontera sur habían arrestado a 169 sospechosos que coincidían con la identidad de una persona en la lista de vigilancia terrorista, frente a las 89 personas identificadas en 2022 y solo 15 en 2021. La lista, también conocida como Base de Datos de Detección de Terroristas, comparte información no clasificada sobre personas de interés público y es administrada por el Centro de Detección de Terroristas, un esfuerzo multiinstitucional encabezado por el FBI.
Los republicanos, liderados por el expresidente Donald Trump, han advertido que el número de terroristas conocidos que ingresan al país podría seguir aumentando a menos que el gobierno haga más para identificar y disuadir las amenazas.
El representante republicano por Luisiana Clay Higgins, presidente del Subcomité de Seguridad Fronteriza, culpó de esa posibilidad a la actual administración: “La administración Biden-Harris sigue facilitando que inmigrantes ilegales no autorizados crucen nuestra frontera, vivan y trabajen en Estados Unidos, en todas las comunidades y en todos los estados soberanos. ¿Cuántos terroristas o presuntos terroristas más es probable que vivan en su comunidad?”
Timothy Healy, ex director del centro de control, dijo a los legisladores el jueves que cree que el problema podría empeorar dado el gran volumen de personas que ingresan al país a través de la frontera sur. Pero más que eso, Healy señaló un cambio reciente en el tipo de personas que intentan ingresar al país.
“En 2021, la demografía de quienes cruzan la frontera comenzó a cambiar. La cantidad de hombres jóvenes que viajan solos por el mundo aumentó drásticamente”, dijo Healy.
Healy señaló que entre principios de 2021 y julio de 2024, más de 10 millones de “escapados” lograron ingresar a Estados Unidos, refiriéndose al número de personas que cruzaron el país y fueron rastreadas por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza que no fueron detenidas por la seguridad fronteriza.
“Estas cifras sin precedentes han destrozado todas las expectativas, han llevado las capacidades de detección de nuestro país al punto de quiebre y han expuesto vulnerabilidades a una escala nunca antes imaginada”, dijo Healy.
Los demócratas presentes en la audiencia calificaron de alarmistas e inútiles los mensajes republicanos sobre el tema. Un testigo, Alex Nowrasteh, vicepresidente de estudios de política económica y social del Cato Institute, estuvo de acuerdo.
Nowrasteh dijo que sólo nueve terroristas conocidos que intentaron perpetrar un ataque han ingresado al país, y todos fueron arrestados antes de que pudieran llevar a cabo sus planes. Cinco de ellos cruzaron la frontera entre Estados Unidos y Canadá. Uno era un polizón en un barco. Los otros tres, los hermanos Duka, ingresaron ilegalmente a través de la frontera entre Estados Unidos y México cuando eran niños en 1984.
Dijo que los temores republicanos de una presencia terrorista generalizada eran exagerados y sostuvo que los inmigrantes que llegan a Estados Unidos lo hacen principalmente con la esperanza de obtener oportunidades económicas.
Incluso al evaluar la actividad terrorista cometida por todos los inmigrantes, independientemente de su estatus legal, Nowrasteh testificó que el número sigue siendo extremadamente bajo.
“Los terroristas nacidos en el extranjero han asesinado a 3.046 personas en ataques en suelo estadounidense desde 1975, lo que equivale al 0,3 por ciento de todos los homicidios durante ese período. Eso incluye, por supuesto, los ataques del 11 de septiembre”, dijo Nowrasteh. Dicho esto, Nowrasteh admitió que el panorama en la frontera sur conlleva un gran potencial de riesgo.
Correa dijo que el problema en la frontera es complejo y requiere de un pensamiento progresista, pero no descarta la idea de que hay mucho trabajo por hacer en la frontera sur.
“¿Cómo se come un elefante? Un bocado a la vez”, dijo Correa. “Las ideas (discutidas) se centran más en todo lo anterior: la detección es una, las causas fundamentales, otras áreas en las que trabajaremos a través de la legislación”.
