En John Hendrix Los creadores de mitos (Abrams, 224 pp.), un león y un mago actúan como narradores para explorar la legendaria amistad de CS Lewis y JRR Tolkien. Hendrix comienza con una descripción general de la infancia y la juventud de cada uno de ellos, pero advierte que su “libro no pretende ser un relato enciclopédico de sus vidas y logros; más bien, es un portal”. El portal bien documentado de Hendrix lleva a los lectores a un viaje atractivo “para desvelar el significado del mito” y analizar por qué fue fundamental no solo para esta amistad y la conversión de Lewis, sino también para la creación de algunas de las más grandes obras literarias jamás escritas.
En El enigma de Bletchley (Viking, 400 págs.), Ruta Sepetys y Steve Sheinkin colaboran para crear un misterio de ficción histórica ambientado en la era de descifrado de códigos de la Segunda Guerra Mundial en Inglaterra. Los estudiantes de secundaria disfrutarán de la acción vertiginosa que comienza con Jakob Novis, de 19 años, descubriendo que su hermana Lizzie, de 14 años, perdió el barco que se suponía que la llevaría a vivir a salvo con su abuela estadounidense. Lizzie ahora debe unirse al mundo secreto de Bletchley Park, donde Jakob trabaja con otros para descifrar el código Enigma.
Lizzie acepta su papel de mensajera en la finca, viéndolo como el pretexto perfecto para ayudarla a descubrir la verdad que rodea la supuesta muerte de su madre. Aunque Jakob al principio se resigna a la pérdida de su madre, la tenaz determinación de Lizzie y una serie de extrañas pistas lo atraen hacia el misterio. Ambos pronto descubren que no todo es lo que parece y deben estar un paso por delante de otros que se interponen en el camino para descubrir la verdad.
Aunque una subtrama describe un romance incipiente entre la joven Lizzie y un niño, los padres apreciarán cómo El enigma de Bletchley ofrece una lectura limpia y casta que combina ficción aventurera con detalles históricos.