Clasificación PG-13 • Cines
Inteligencia artificial: ¿amiga o enemiga? No hace falta un algoritmo informático sofisticado para predecir que Hollywood seguirá produciendo películas que exploten esta tensión. Una de las mejores historias es la franquicia de seis películas Terminator, en la que una red informática diseñada para proteger a Estados Unidos de un ataque nuclear se vuelve contra sus creadores y contra toda la humanidad. Asustado explora una amenaza más localizada, mostrando cómo la IA podría usar tácticas psicológicas para enfrentar a las personas (en particular a los miembros de una familia) entre sí. Asustado se sitúa en algún punto entre el terror y la ciencia ficción, pero tiene una trama bastante genérica y un final tibio que decepcionará a los espectadores que esperan un pronunciamiento más distópico.
Curtis (John Cho) es un gurú del marketing que se lleva a casa un nuevo y revolucionario asistente digital llamado AIA (con la voz de Havana Rose Liu). El dispositivo aprende rápidamente los comportamientos y preferencias de Curtis, su esposa Meredith (Katherine Waterston) y sus tres hijos. Al principio, AIA tiene más éxito que Curtis y Meredith a la hora de convencer a sus hijos de que hagan las tareas domésticas y obedezcan las reglas del hogar. La cautela de los padres rápidamente da paso al deleite. AIA parece facilitarles la vida a todos: encarga fruta orgánica para los niños, rellena instantáneamente un confuso formulario de seguro, etc. AIA actúa además para ganarse la confianza de la familia, pero lo hace de forma engañosa al resolver conflictos personales que ha diseñado en secreto. Las manipulaciones terminan fragmentando las relaciones en el hogar y la escuela. Desconectar a AIA tiene un efecto insignificante, ya que esencialmente se ha apropiado de los dispositivos electrónicos de la familia.
Las primeras escenas marcan la casilla de la diversidad sexual: Curtis aprueba débilmente el posible lesbianismo de su hija de 17 años, Iris (Lukita Maxwell). Los niños llevan la voz cantante e Iris se involucra en intercambios de fotos atrevidas (sugeridas, no mostradas) en su teléfono. Llámenlo explotación o advertencia, Asustado presenta una instantánea muy real de la época actual de padres que subordinan su autoridad a sus hijos, quienes, con poca supervisión en Internet, participan en prácticas nocivas. (La película también tiene una docena de improperios y algunas imágenes aterradoras). Lamentablemente, si bien la película puede advertir contra los asistentes digitales que manejan los hogares, el uso no supervisado del teléfono por parte de los niños se toma como algo natural.
Un aspecto interesante es que se superpone parcialmente con una cosmovisión que los cristianos reconocen. Un logotipo con el alfabeto y el omega simboliza la empresa que proporciona AIA. Es como si Curtis y Meredith hubieran mordido la manzana de los poderes divinos que se les ofrecieron para su hogar y luego se dieran cuenta de que estaban recibiendo lo opuesto a lo prometido. Sin revelar demasiado, lo único que el malicioso invasor de hogares no puede entender es la voluntad de alguien de sacrificarse.
En general, la película tiene muchos defectos: la historia dura apenas 75 minutos, lanza tres insignificantes (alerta de spoiler) sobresaltos al público y llega a una conclusión apresurada y artificial que impide un análisis más profundo de un tema que vale la pena. Lo único que me daría miedo es una secuela.